MÁRIO DE SÁ-CARNEIRO, EL CUENTISTA ERRANTE

por Alba y Alejandro

    Tal día como hoy, 19 de mayo, nace uno de los máximos representantes del Modernismo en Portugal y miembro de la Generación Orpheu: Mário de Sá-Carneiro.

    Nacido en Lisboa un día como éste del año 1890, fue un poeta, novelista y cuentista portugués. A pesar de su procedencia de adinerada familia burguesa, una mala racha provocó la orfandad de éste con apenas dos años. Así pues, fueron sus abuelos quienes mantuvieron el cuidado y responsabilidad del infante.

    Con doce años se inició en la poesía, y a los quince traducía a Víctor Hugo, Goethe y Schiller a los dieciséis. Se mudó a Coímbra a los diecinueve años para matricularse en la Facultad de Derecho de la Universidad de Coímbra, que no concluyó ni quisiera el primer año. De todas formas, fue allí donde conoció a Fernando Pessoa, su mejor y más cercano amigo.

    Se trasladó a París para proseguir sus estudios, mas no tardó en dedicar su vida a deambular por los cafés y salas de espectáculo, donde conoció al pintor futurista portugués de nombre Guilherme de Santa-Rita. Y en este ambiente, comportándose como un inadaptado psicológico y social, compuso gran parte de su obra poética (entre 1912 y 1916) en la que desarrolla fundamentalmente su carrera como escritor. Fueron sus últimos años con vida, ya que una vez de regreso a París en 1915 entró progresivamente en una depresión que acarreaba como consecuencia un intenso deseo del suicidio. Fue así como en el Hôtel de Nice, en Montmartre, encontraron su cuerpo tras haberse ingerido cinco frascos de arseniato de estrictina en presencia de su amigo José de Araújo. Falleció con tan sólo 26 años.

    Sus compañeros modernistas dedicaron varios homenajes a su persona tras la muerte. Su fama posterior a su fallecimiento lo convirtió en uno de los mayores exponentes de la literatura portuguesa moderna, a medida que se publicaba al gran público su obra poética. Varios artistas llegaron a musicar algunos de sus poemas como O Outro, entre varios. Y en Camarete, tierra donde se había criado durante su infancia, homenajearon al autor dándole su nombre a una escuela.

Entre sus obras destacan Amizade (1912), Princípio (1912),  A Confissão de Lúcio (1913), Dispersão (1914), Céu em Fogo (1915) e Indícios de Oiro (1937).