El arte del engaño o sobrevivir a la lectura
El verbo leer, como el verbo amar y el verbo soñar, no soporta ‘el modo imperativo’.
JORGE LUIS BORGES
La lectura de los clásicos medievales produce repelús entre el alumnado. Incitarlos a su deleite es vesania. En una ocasión una compañera de materia me confesó la rebelión vivida en el aula cuando facilitó a sus pupilos de Bachillerato la propuesta de lecturas. "Dos o tres por evaluación...¡La que me montaron!...¿Te lo puedes creer? -afirmaba indignada y abatida- Si hasta me llevaron a Jefatura. Y tú, ¿qué les pones?" "Lo mismo -señalé- Pero no lo saben".
La lectura obligatoria para esta evaluación es La Celestina; sin embargo, deben realizar un audio o un vídeo bien de una copla de Jorge Manrique, bien de un cuento de El Conde Lucanor, bien de un relato o poema de terror de algún clásico (Esta última opción encaja en el proyecto "Cando petan na porta polas aulas"). En esa criba y selección del texto puede caer la breva de que se lean un libro más, o dos, o todo un elenco...
Daniel Acebo recita y ¿escribe? como todo un varón del medievo...
Algunos recomendados:
EDGAR ALLAN POE: http://ciudadseva.com/autor/edgar-allan-poe/cuentos/HORACIO QUIROGA :
http://ciudadseva.com/texto/el-hombre-muerto/
http://ciudadseva.com/texto/la-gallina-degollada/
LOVECRAFT
http://ciudadseva.com/autor/h-p-lovecraft/cuentos/
MAUPASSANT
http://ciudadseva.com/autor/guy-de-maupassant/cuentos/
ARTHUR MACHEN
http://ciudadseva.com/autor/arthur-machen/cuentos/